Uruguay debe consolidar una política energética nacional “moderna, justa y sostenible” para avanzar hacia el desarrollo Generación, Sistemas y estadísticas

03/04/2025

Uruguay

La ministra Fernanda Cardona detalló los
planes del Gobierno para desarrollar una transformación energética que, como
ocurrió cuando consolidó su matriz eléctrica renovable, debe estar basada en un
acuerdo multipartidario y contar con la visión de todas y todos los actores del
sistema. “Uruguay tiene una ventana de oportunidad real para consolidarse como
un hub energético regional y una plataforma de innovación sostenible, pero esta
ventana nos exige avanzar en la dirección adecuada y direccionar las políticas”,
precisó. De ese modo, se logrará “un modelo productivo moderno, justo y
sostenible”, afirmó la titular del MIEM.

La ministra
de Industria, Energía y Minería, Fernanda Cardona, fue la invitada del desayuno
de trabajo que organizó la Asociación Uruguaya de Energías Renovables (AUDER)
el 2 de abril, en el auditorio del Banco de Desarrollo de América Latina y el
Caribe-CAF. En el encuentro también expuso el presidente de AUDER, Diego Oroño.

En su
presentación, la ministra Cardona destacó el vínculo entre la mueva
administración del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) y AUDER.
En este marco, la secretaria de Estado sostuvo que es importante establecer
criterios y ejes de trabajo conjuntos, y remarcó que la construcción de la
transformación energética en Uruguay requiere de una labor colectiva. “Los
intercambios que surgen de acá no solo tratan del sector eléctrico, sino
también del futuro del país”, dijo la secretaria de Estado.

“Uruguay ya
logró ubicarse como un referente en energías limpias, trabajando con
convicción, con políticas públicas acertadas y con el esfuerzo de muchos
sectores, desde el Estado y las empresas hasta la academia y los trabajadores y
trabajadoras”, planteó la titular del MIEM. A partir de esta base, el Gobierno
tomará la “decisión soberana” de liderar una nueva transformación energética.
Para eso —indicó— se requiere un acuerdo multipartidario, tal como ocurrió
cuando se transformó la matriz eléctrica, a partir de 2010. La jerarca afirmó
que considera que ese debe ser el camino para concretar una nueva política
nacional energética.

Esta
política se analizará sobre la base de una mirada de triple impacto, que, de
forma transversal, en todo el gabinete, considerará lo económico, lo social y
lo ambiental.

Cardona
dijo que Uruguay ha demostrado ser capaz de avanzar con esa triple mirada, por
ejemplo cuando transformó su matriz eléctrica y se consolidó como referente en
energías renovables. “Redujimos nuestra dependencia de los fósiles, mejoramos
nuestra balanza comercial […], generamos empleos calificados […] y mejoramos la
resiliencia del sistema”, destacó. No obstante, aclaró que ese ciclo se cerró y
es necesario abordar una nueva etapa para dar “un salto con valor agregado,
disruptivo”.

“Uruguay
tiene una ventana de oportunidad real para consolidarse como un hub energético
regional y una plataforma de innovación sostenible, pero esta ventana nos exige
avanzar en la dirección adecuada y direccionar las políticas”, precisó. De ese
modo, se logrará “un modelo productivo moderno, justo y sostenible”.

El desafío
es consolidar lo ya logrado y —a pedido del presidente de la República, Yamandú
Orsi— asegurar que los beneficios del desarrollo lleguen a cada uruguaya y
uruguayo.

Energía y
desarrollo

La ministra
Cardona remarcó la importancia de seguir avanzando en materia de energías
renovables y limpias, especialmente la solar fotovoltaica. Como ejemplo, citó
que se planifica una planta en Cerro Largo, cercana a Brasil, que resulta
estratégica para generar “más energía, oportunidades de exportación con
renovables y desarrollo para el interior del país”.

La ministra
se mostró favorable a que estos proyectos convivan con otros agroindustriales,
para incorporar valor agregado en la matriz energética. “Nuestra premisa es que
la energía renovable tiene que ser más que producción eléctrica: debe
integrarse con el desarrollo industrial y rural del país”, sostuvo. Esto será
clave para descentralizar los beneficios que surjan de este desarrollo.

“Uruguay
tiene una oportunidad ineludible: transformar su fortaleza energética en una
plataforma estratégica para el desarrollo productivo, la inclusión social y la
integración regional”, aseveró la ministra. Se trata de “dar el salto hacia un
modelo energético y productivo del siglo XXI”, que requiere una planificación
clara, “una institucionalidad moderna y eficiente”, “una decisión política”,
“un rumbo claro” y “una ética estricta”.

“Queremos
que la energía sirva para impulsar la industria, bajar los costos, abrir nuevos
mercados, dinamizar economías regionales, crear empleo y atraer inversiones que
apuesten por la calidad, la sostenibilidad y la equidad”, añadió.

El objetivo
es lograr una cadena de valor nacional, en la que el sector público lidere la
transformación y articule con el sector privado, planificando y logrando
acuerdos. El papel de las empresas públicas será “central” y “protagónico”,
mientras que el MIEM también cumplirá un rol clave para articular y acercar a
los diferentes actores del sistema.

Energía
como derecho

“La
transformación energética tiene un rostro humano” y los desarrollos del sector
deben reflejarse en la vida cotidiana, dijo la ministra Cardona. Por eso, el
Gobierno se asegurará de que nadie quede “al margen” por su lugar de residencia
o su condición social.

“La energía
es un derecho”, afirmó la secretaria de Estado, y por eso, de forma limpia y
confiable, debe llegar a todo el país y derramar sobre el aparato productivo.
Se trata de una herramienta de descentralización para que todos los uruguayos y
uruguayas puedan quedarse en los lugares en que nacieron, añadió.

Hidrógeno
verde

“Uruguay no
puede abandonar la discusión sobre el hidrógeno verde”. Cardona recordó que
Europa fijó su atención en nuestro país debido a nuestras fortalezas, por lo
que no debemos dejar de lado ese camino de diálogo.

Sin
embargo, remarcó que se deben considerar algunos aspectos clave. Uno de ellos
es “tener la seguridad de una demanda” para poder cumplir con una mirada de
triple impacto. Los términos económicos —dijo la ministra— deben cerrar
adecuadamente. A su vez, reclamó un mayor énfasis en el análisis de las
posibilidades que plantee la incorporación de los derivados del hidrógeno verde
en la industria nacional.

Uruguay
debe estar “a la vanguardia de las discusiones” internacionales en este tema,
para prepararse adecuadamente para los proyectos que surjan. Los que hoy están
planteados ya se están analizando en profundidad, aseguró.

Integración
y soberanía

La ministra
afirmó que Uruguay debe dar un salto cualitativo para pensar en un “sistema
abierto”. El país necesita analizar sus posibilidades de exportación en la
región, a través de la optimización de la infraestructura y la adecuación del
marco regulatorio.

Uruguay
cuenta con “vocación de integración”, que implica una oportunidad de desarrollo
y complementariedad energética. Los países de la región tienen una historia en
común, y también los mismos retos: “garantizar seguridad energética, bajar
costos, descarbonizar nuestras matrices”, dijo Cardona.

Por eso el
MIEM impulsará una “estrategia activa de integración”, en la que el Gobierno
dialogará con gobiernos centrales, provincias, agencias multilaterales y
empresas.

Uruguay
debe ser competitivo, con una mirada de largo plazo para lograr estos
objetivos, agregó. El objetivo es continuar teniendo como norte soberanía
energética, la que definió como “una premisa innegociable”. Ese objetivo estuvo
en la base de la transformación de nuestra matriz eléctrica y debe estar en la
base de la nueva transformación, explicó.

Un nuevo
capítulo

“El sector
público tiene que estar a la altura, asegurando reglas claras, políticas de
incentivo y un marco estable para el crecimiento. Las empresas tienen que
seguir apostando a la innovación y a la sustentabilidad, pero con una mirada
social, que genere empleo y oportunidades. La sociedad en su conjunto tiene que
entender que la energía renovable no es un lujo ni un capricho ambiental: es la
base de un país más moderno, más equitativo y más competitivo”, dijo la
ministra Cardona.

 “Uruguay ya hizo historia con su
transformación eléctrica. Ahora nos toca escribir el siguiente capítulo”, que
debe ser “mejor que el que ya vivimos”, cerró la ministra. (Sitio Oficial
de la República Oriental del Uruguay – Uruguay)