La interconexión por el Golfo de Bizkaia ahora avanza
en el País Vasco con el inicio de la obra civil de los edificios que
conformarán la nueva estación conversora
Las obras
de la interconexión eléctrica con Francia por el Golfo de Vizcaya avanzan a
buen ritmo. Así lo han comprobado esta semana representantes de la Agencia
Ejecutiva Europea de Clima, Infraestructuras y Medio Ambiente de la Comisión
Europea (CINEA por sus siglas en inglés), que han visitado las obras,
destacando el carácter estratégico de esta infraestructura para el Mercado
Único Europeo y la Unión en su conjunto.
Tras
dedicar los últimos meses a los trabajos preparatorios para el tramo terrestre
y movimiento de tierras de la nueva estación conversora, del enlace que unirá
Gatika con Cubnezais, Red Eléctrica prosigue en País Vasco con la construcción.
Se está iniciando la obra civil de dos edificios que irán totalmente
apantallados con vegetación, y junto a la ubicación seleccionada, se minimizará
el impacto visual.
Los
trabajos a ambos lados de la frontera siguen ejecutándose conforme a la
previsión y tiempos establecidos, como ha podido observar la delegación de
CINEA en su visita a localidades de Cubnezais, Ambès y Seignosse en Francia, y
de Gatika y Lemoniz en España. Asimismo, han conocido las tecnologías avanzadas
que se están aplicando a ambos lados de la frontera, para llevar a cabo el
proyecto con el mínimo impacto, como las obras singulares de salida al mar con
los microtúneles ya ejecutados en Francia y las perforaciones dirigidas que se
están iniciando en Lemoniz.
En Francia,
los edificios de la conversora están en construcción. En el trazado, se ha
avanzado notablemente en los trabajos de excavación necesarios para las dos
líneas eléctricas, así como en las excavaciones en los accesos a tierra (zona
de conexión entre la parte marítima y terrestre de la interconexión eléctrica)
en Porge (Gironda), Seignosse (Landas) y Capbreton (Landas).
La agencia
europea CINEA supervisa la implementación y el seguimiento de infraestructuras
que, como esta, han sido declaradas Proyecto de Interés Común para la Unión
(PCI). Cuenta con un programa llamado CEF (Connecting Europe Facility), que es
el instrumento de financiación de la Unión diseñado para apoyar el desarrollo
de redes transeuropeas de energía, por lo que proporciona apoyo financiero a
los PCI, contribuyendo a cubrir los costes relacionados con estudios y obras.
El proyecto del Golfo de Bizkaia cuenta con una subvención de 578 millones de
euros asignada por la Unión Europea a través de CINEA.
La
interconexión del Golfo de Vizcaya
El proyecto
de enlace submarino entre ambos países es de crucial importancia para Europa en
su conjunto al permitir avanzar y facilitar la transición hacia una economía
descarbonizada.
Entre sus
beneficios, permitirá doblar la capacidad de intercambio eléctrico entre ambos
países hasta los 5.000 MW, lo que servirá para reforzar la seguridad y la
calidad del suministro en ambos sistemas eléctricos, avanzar en la integración
de renovables, en línea con los objetivos de energía y clima nacionales y
europeos, y aumentará la eficiencia de ambos sistemas, generando ahorros que se
trasladarán en un beneficio para los consumidores. De esta manera, además de
ser reconocido como PIC, es uno de los proyectos más relevantes recogidos en la
Planificación de redes europea. A nivel nacional, está infraestructura está
contemplada como clave en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima y forma
parte de la Planificación eléctrica vigente.
La
interconexión conectará los sistemas eléctricos español y francés a través de
dos enlaces de 400 kV desde la localidad vizcaína de Gatika hasta la localidad
francesa de Cubnezais, en el entorno de Burdeos, con un recorrido enteramente
subterráneo y submarino que minimiza su impacto en el entorno. Las obras las
lleva a cabo Inelfe participada al 50% por Red Eléctrica y su homólogo francés
RTE y con el apoyo de proveedores de servicios europeos especializados entre
los que se encuentran NKT HV Cables y Prysmian Powerlink, para la instalación
de los cables submarinos, el consorcio FASSET para los trabajos de instalación
de los cables subterráneos, y el consorcio HITACHI ENERGY/VINCI, para las
conversoras.
La puesta
en marcha de esta nueva interconexión entre Francia y España permitirá a ambos
países beneficiarse de 7.430 GWh/año de electricidad libre de emisiones, el
equivalente al consumo de alrededor de 2 millones de hogares. También reducirá
la huella de carbono de la producción de energía eléctrica en Europa en 600.000
toneladas, el equivalente a 6.190 millones de kilómetros de un coche de
combustión o la cantidad de carbono absorbido por 480 km2 de árboles. (El
Periódico de la Energía – España)