En
2024 se comercializaron 5.856 vehículos y este la proyección indica que se
superará la cifra; en total, en el país ya existen más de 10.000 unidades
circulando
Uruguay se
ha posicionado en los últimos años como líder regional en movilidad eléctrica,
con un «boom» en ventas, una infraestructura en expansión y acelerados avances
tecnológicos tanto en el rendimiento como en la velocidad de carga de las
baterías. Por las calles uruguayas circulan hoy más de 10.000 vehículos
eléctricos, según estima la Asociación del Comercio Automotor del Uruguay
(ACAU).
Las ventas
en este segmento alcanzaron un crecimiento récord en 2024, triplicándose
respecto al año anterior. Los 5.856 vehículos eléctricos de 2024 significaron
un 7,6% del total de los 0 km comercializados en el país, de acuerdo con datos
de la ACAU.
Todo indica
que este año se establecerá un nuevo récord. En los primeros cuatro meses ya se
colocaron 3.101 unidades, con una participación que trepó al 14,5% del mercado
total de las ventas de 0 km. Entre enero y abril se vendieron 1.521 autos
eléctricos de pasajeros, 1.371 SUV, 189 utilitarios y 20 camiones.
«Todas las
proyecciones muestran curvas explosivas al alza», comentó Ignacio Paz, gerente
general de ACAU, para señalar que «hoy el 21% de los SUV que se venden en
Uruguay son eléctricos».
Varios son
los diferenciales y las fortalezas competitivas del vehículo eléctrico frente
al de motor de combustión, con una mirada que trasciende su impacto positivo a
nivel ambiental.
Cargar la
batería de un eléctrico es significativamente más económico que llenar un
tanque de combustible, especialmente con tarifas bonificadas en horarios valle.
«Lo que lleva $ 1 de electricidad, ese mismo recorrido sale 10 veces más con un
motor a combustión», explicó Paz.
En cuanto a
la autonomía promedio, la mayoría de los modelos alcanzan entre 300 y 500
kilómetros por carga completa de batería.
Menores
costos de mantenimiento y reparación, es otra de sus ventajas competitivas. Un
coche a combustión cuenta con entre 17.000 y 20.000 piezas frente a las 2.500
del eléctrico, que además realiza el servicio técnico cada 20.000 km.
Pero el
mayor impulso a las ventas de los modelos eléctricos llegó gracias a los
incentivos económicos y fiscales, que se reflejan tanto en el precio como en el
costo de mantenimiento. Así, estos vehículos pagan la mitad de la patente de
rodados, mientras que la Dirección Nacional de Energía reintegra hasta US$
6.000 ante la presentación de la factura de compra del auto y según los
kilómetros recorridos durante el primer año.
En tanto,
el Imesi es 0% para los coches eléctricos, al tiempo que para los de combustión
oscila entre el 30% y 35%. A su vez, la ley de promoción de inversiones (Comap)
prevé beneficios en el Impuesto a la Renta. En cuanto a los aranceles de
importación, los eléctricos están exentos del arancel general del 23%,
aplicándose solo una tasa consular del 5%.
«Si se
quitan todos estos incentivos fiscales, se derrumba el mercado de los vehículos
eléctricos porque siguen siendo caros sin esos estímulos», advirtió el gerente
general de ACAU.
En cambio,
el servicio de transporte público «es prácticamente sinónimo de movilidad
eléctrica» con ómnibus, taxis y aplicaciones de transporte, afirmó Paz y
agregar: «Ahí estamos en un camino sin retorno por los diferenciales
competitivos en el rubro consumo y mantenimiento».
Enfoques
Destacados
protagonistas del sector automotor analizaron el presente y futuro de la
movilidad eléctrica en Uruguay en diálogo con El Empresario.
Para el
gerente general de general Motors Uruguay, Claudio D’Agostini, las ventas de
los eléctricos han superado las expectativas. En esa línea, sostuvo que
actualmente la cantidad de cargadores de baterías -unos 300- «ya empiezan a no
dar abasto». Ante esto, adelantó que la compañía está «trabajando a futuro, en
una estrategia regional para promover los cargadores privados en los hogares».
Chevrolet
se presenta también como la primera marca tradicional en ofrecer «un coche
eléctrico accesible», con la comercialización del Spark EUV, indicó D’Agostini.
Por su
parte, BYD es lamarca líder del mercado de vehículos eléctricos en Uruguay, de
la mano de la empresa Sadar.
«A partir
de la venta de los primeros autos eléctricos en 2019, registramos un
crecimiento exponencial y explosivo. Pasamos de 53 a 3.700 unidades eléctricas
en 2024, y este año ya llevamos vendidos 1.800 en cuatro meses», sostuvo
Santiago Guelfi, director de Sadar.
Este es
solo el comienzo, afirmó Guelfi, quien proyecta que «de cada 10 autos que se
vendan para 2026 – 2027, cuatro serán eléctricos». Para alcanzar ese objetivo,
es clave que «existan incentivos fiscales, red de carga, oferta de marcas y
modelos, y el beneficio económico para el consumidor uruguayo para que se
genere la demanda», subrayó.
Mientras
tanto, el Grupo Santa Rosa fue pionero en la incorporación masiva de estos
vehículos en Uruguay. «El Renault Kangoo ZE fue el primer modelo eléctrico de
la marca que llegó a Uruguay en 2015, para integrar la flota de UTE», indicó el
director de Operaciones de Grupo Santa Rosa, Pablo Ramos.
«Hace unos
cuatro años iniciamos un proceso de reestructuración del negocio, proyectando
la electrificación del mercado, con una estrategia detrás de China. Así
incorporamos 10 marcas nuevas, diseñadas para ser lanzadas en Europa y que son
las que tienen mejor futuro por calidad de producto, tecnología, confiabilidad,
capacidad técnica y trayectoria del fabricante», expresó Ramos.
El 10% de
las ventas totales del Grupo Santa Rosa ya corresponde a vehículos eléctricos
y, para el próximo año, el ejecutivo estima que alcanzará a un 30%.
En tanto,
Richard Lempert, director general de Grupo Fiancar, afirmó que la venta de los
vehículos de nuevas energías (NEV) «es una tendencia global». En esa línea,
resaltó que en los mercados automotrices mas grandes, como China y algunos
países de Europa, «los NEV ya alcanzan el 50% de las ventas totales mientras
que en EE.UU. superan el 20%».
Como
representantes de Geely y de Lynk & Co, Fiancar trabaja para traer al país
«los mejores productos de estas marcas, con las mejores prestaciones y al
precio más competitivo posible», agregó el director del Grupo Fiancar.
Lempert
indicó que en el caso de JAC Motors, apalancada en su trayectoria y liderazgo
en el mercado de camiones, se posicionó en la fabricación de autos de pasajeros
a combustión, migrando en los últimos años hacia el segmento de eléctricos.
«Hoy JAC es la tercera marca más vendida de autos eléctricos en Uruguay, y la
más vendida de camiones eléctricos», subrayó.
En el caso
de Fidocar, el desempeño exhibe una fuerte expansión. El año pasado cerró con
un 30% de incremento en ventas totales, y en este primer cuatrimestre del año
ha crecido a un ritmo del 40%, bajo el impulso de la venta de los vehículos
eléctricos y, en segundo término, los híbridos, detalló Victoria Hernández, CEO
de Hyundai Fidocar.
Para
Fidocar hay un fuerte potencial de crecimiento a futuro, en una tendencia que
ha llegado para quedarse. «Entre híbridos y eléctricos, hoy estamos hablando de
un 18% aproximadamente de participación de mercado», indicó.
Asimismo,
Fidocar es socio estratégico en el desarrollo de una planta de hidrógeno verde
en Fray Bentos. En una primera etapa, está prevista para el transporte
forestal. Los camiones tendrán una autonomía de unos 700 kilómetros y un tiempo
de carga del depósito de hidrógeno en12 minutos.
Los
entrevistados coinciden que en el futuro van a convivir los vehículos a
combustión, híbridos y eléctricos. Hay espacio para todos. (El País – Uruguay)