Valenzuela, Luis; Montaña, Claudio
Chilectra
Desde el año 1998 y hasta mediados del año 2003, los medidores de clientes de Chilectra S.A. estuvieron sin diagnóstico y por ende sin reacondicionamiento o reemplazos programados.
Sólo se efectuaba mantenimiento correctivo o reemplazos por reclamos de clientes. Esto originaba deterioros en la calidad de la medida y por consiguiente en el proceso de facturación.
Lo anterior debido a resoluciones de la autoridad en contra de Chilectra S.A. por los cobros realizados por mantenimiento efectivo de medidores propiedad de clientes; a pesar de las resoluciones de la Corte Suprema de Justicia de Chile, respecto a que los mantenimientos efectivos realizados a los clientes deben ser cobrados.
Esto motivó abordar el desarrollo y evaluación de un plan de mantenimiento efectivo de medidores propiedad de clientes. El plan consideró el mantenimiento (preventivo y correctivo) de medidor y accesorios dentro de la caja del medidor. Se estableció una periodicidad y garantía de 4 años para el medidor y sus accesorios, y se fijo un precio único. Dicho plan con sus alcances respectivos fue informado a la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) como un servicio no regulado a prestar por la Distribuidora, entrando en ejecución el 10 de julio de 2003.
Al transcurso de poco más de un año de operación, el 14/10/2004, la autoridad regula el servicio Mantenimiento de Medidor de Propiedad del Cliente. Estableciendo su alcance, estructura de costos y formas de implementarlo. Destaca el hecho que el Organismo o Laboratorio de Certificación Autorizado que ejecutará el trabajo en terreno (diagnóstico y calibración) deberá ser seleccionado mediante un proceso de Licitación.
Dicho plan presenta una solución a múltiples problemas con el mantenimiento y la calidad metrológica de los equipos de medida, tanto para el cliente y la empresa concesionaria. Permite resolver el problema del diagnóstico y del mantenimiento preventivo y correctivo de los medidores, asegura la calidad de medición del cliente dentro de rangos estandarizados, y garantiza la seguridad de las instalaciones eléctricas existentes en la red de distribución.
Ya que el servicio es pagado por el cliente, los beneficios monetarios se traducen en un margen de utilidad para los Organismos o Laboratorios de Certificación Autorizados (nace un nuevo negocio), y también lo puede ser para la distribuidora, dependiendo del grado de eficiencia que logre para un determinado periodo de mantenimiento (4 años).
Finalmente, existen otros beneficios indirectos para la concesionaria, como son la recuperación de pérdidas debido al subregistro de los medidores, detección de hurtos y su normalización, focalización de los problemas de las acometidas Aéreas, entre otros.