Acuña, Marco
CNFL
Costa Rica tiene generación eólica desde los años noventa y para el 2007 existen instalados 71 MW. Estas plantas están conectadas a la red de transmisión de 230 kV sin clientes de media o alta tensión aledaños a las líneas de interconexión. La CNFL, S.A., empresa de distribución costarricense, sin embargo, va a interconectar generación eólica a su red de distribución de 34,5 kV, entonces, nace la necesidad de estudiar con mayor profundidad el impacto de las plantas eólicas en las redes de media tensión para evitar desmejorar la calidad de la energía de los clientes y garantizar una operación aceptable de la planta eólica en el sistema de distribución. Debido a lo anterior se presenta una metodología para seleccionar los puntos más aptos de una red de distribución para interconectar una planta eólica. Para fijar la metodología se modelará una planta eólica genérica conformada por varios aerogeneradores en Matlab/SimPowerSystems 7.1. La planta será de dos tecnologías, aerogeneradores de velocidad fija y aerogeneradores de velocidad variable. Con el modelo se simulará un caso teórico que consiste en una planta eólica de mediana capacidad conectada a una barra de distribución. Se analizará la susceptibilidad de la tensión de este punto ante la operación de la planta. Para lo anterior se simulará el sistema variando parámetros como potencia de cortocircuito del punto de interconexión, relación X/R, longitud de la línea de interconexión de la planta y su capacidad nominal. Con los análisis realizados se determinó que las plantas eólicas de velocidad fija que pretendan conectarse al sistema de distribución no podrán tener una potencia nominal mayor a 15 MW y una línea de interconexión mayor a 25 km. Además el punto de interconexión deberá tener una capacidad de cortocircuito mayor a 1500 MVA en el equivalente del sistema de transmisión. Para el caso de plantas de velocidad variable, estas pueden tener una potencia de hasta 25 MW conectadas con una línea de interconexión con una longitud máxima de 25 km y el punto de interconexión debe tener una potencia de cortocircuito mayor a 500 MVA. Para probar la metodología, se aplicará esta a un caso particular de la CNFL, S.A. considerando además aspectos geográficos y condición de las posibles subestaciones de interconexión.